FORO SOBRE LANZAROTE

Según diariodelanzarote.com:

Dos agentes de la Policía Local de Tías aseguran en un escrito remitido al alcalde, José Juan Cruz, que el jefe del Cuerpo se vio envuelto en un accidente de tráfico en la noche del jueves 17 de enero. Los agentes afirman que huyó del lugar y que en la huida "casi arrolla" a uno de los policías. Además, sostienen que recibieron "insultos" y "amenazas" por parte de su superior.



El informe de los dos agentes se registró a las 13.15 horas del día siguiente, el 18 de enero, y en el mismo (número de registro de entrada 820) se pide al alcalde de Tías que, como máximo responsable de la Policía Local, obre "en consecuencia según su criterio".

También exponen que el escrito se lo remiten a José Juan Cruz "con el único objeto de tenerle informado", si bien sostienen que fue el propio alcalde quien avisó a la Policía Local del accidente de circulación en la Avenida Central de Tías y que, posteriormente, también se le dio cuenta del desenlace de la intervención por vía telefónica.

Según el relato de los agentes, "sobre las 23.10 horas" del 17 de enero se recibió una llamada "del Sr. Alcalde comunicando" que "había un accidente de circulación en el que estaba implicado el Subinspector Jefe de la Policía Local de Tías".

El accidente, detallan, se produjo a la altura del número 137 de la avenida central. Los agentes afirman en su escrito que, cuando proceden a "iniciar la inspección ocular del accidente", su superior "se encontraba en el lugar". "Tras ser saludado disciplinariamente, procede a ordenar a los agentes (...) que abandonen el lugar, que él era el Jefe y todo estaba aclarado", añaden.

Sin embargo, "la dueña del vehículo dañado en el accidente manifestó que no había nada aclarado" y los agentes requieren a su superior para que aporte "la documentación del vehículo y así proceder a la confección del correspondiente atestado de tráfico", además de dar a la "perjudicada" los datos del seguro para que pudiese "reparar su vehículo".

En el escrito remitido al alcalde, los agentes aseguran que, en ese momento, "el Jefe de la Policía intentó agredir" a uno de ellos, que tuvo "que esquivar la agresión a la vez que sujetar" a su superior "para impedir que se marchase del lugar".

"A continuación", señalan en su informe, "tras creer que el Jefe [de la Policía] procedía a coger la documentación del vehículo, éste en una maniobra evasiva y peligrosa, pues casi arrolla al agente (...), procede inexplicablemente a huir del lugar conduciendo su propio vehículo".

Los agentes indican que "de inmediato" comenzaron una "persecución" con el objetivo de "detenerle en su marcha y evitar otro posible accidente". En su relato afirman que "se encontraba en un estado lamentable" y que "se apreciaba sin lugar a dudas que su estado era el de una persona ebria y alterada, presentando una fuerte halitosis etílica además de no guardar el equilibrio, llegando a caerse al suelo".

"Tras unos dos kilómetros de persecución por la Avenida Central, [por la] calle Libertad y la carretera Tías-Puerto del Carmen", logran que el Jefe de la Policía se detenga, detallan en su escrito.

Además, los agentes aseguran que, "tras haber detenido el vehículo", tuvieron que "sacar" a su superior del mismo "a la fuerza". En ese momento, agregan, el Jefe de la Policía Local "arremete contra el Jefe de servicio, además de proferir insultos contra los agentes actuantes y amenazas con apertura de expedientes sancionadores". El responsable de la Policía Local llega a "romper la chaqueta del Jefe de servicio", según se recoge en el escrito.

En ese momento, los agentes detallan que se vuelve a recibir otra llamada del alcalde, al que se le informa "de los hechos" que estaban "acaeciendo". "Tras ser informado", y siempre según la versión de los agentes, el primer edil pide a los policías que le retiren "las llaves del vehículo" a su superior y que lo lleven "hasta su domicilio". Fue otra unidad policial la que procedió a trasladarlo.

Preguntado este domingo por el citado escrito de los agentes de la Policía Local, el alcalde de Tías admitió conocerlo pero rechazó hacer valoraciones sobre el mismo. "Todo lo que se registra lo sé", señaló el alcalde. Eso sí, negó que hubiese una denuncia por los presuntos hechos relatados por los agentes. "No tengo más constancia que el escrito", zanjó sobre la posibilidad de aplicar algún tipo de medidas.

Escrito remitido al alcalde de Tías:
http://www.diariodelanzarote.com/docume ... l_tias.pdf

Según lavozdelanzarote.com:

El Juzgado de lo Penal número 1 de Arrecife ha absuelto al jefe de la Policía Local de Tías, Francisco Domingo Hernández, que había sido acusado de un delito de atentado a agentes de la autoridad y otro contra la seguridad vial. Los hechos, que fueron juzgados el pasado mes de mayo, se produjeron en la noche del 17 de enero de 2008, cuando Hernández protagonizó un accidente de tráfico. Según la Fiscalía, el jefe de la Policía Local estaba bajo los efectos del alcohol y atentó contra los agentes que intervinieron.



Sin embargo, la sentencia da por buenos los argumentos de la defensa, representada por Francisco Torres Stinga. Durante la vista oral, que se celebró durante dos jornadas, los días 25 y 31 de mayo, el abogado de Francisco Domingo Hernández pidió la absolución de los delitos que se le imputaban, al considerar que el acusado había sido “víctima de una hipoglucemia”, que dejó “mermadas sus facultades” y que le produjo “una alteración mental transitoria” .

Asimismo, la defensa consideraba que, aunque el acusado había reconocido que se tomó “un whisky”, no quedaba acreditado que fuera en estado de embriaguez, ya que los agentes no le realizaron la prueba de alcoholemia. Tampoco constaba que le hubieran hecho el ofrecimiento, ni en la denuncia que presentaron los agentes en el Ayuntamiento, ni en el borrador del atestado que hicieron y que no llegó a ser entregado en los Juzgados.

Además, a través de la declaración de los diferentes testigos, para la defensa quedaba acreditado que los síntomas de la hipoglucemia y de la embriaguez se podían confundir. “Todos han coincidido en señalar que estaba fuera de sí, como un loco, tanto los agentes, como la propietaria del vehículo, como el hermano del alcalde”, señaló la defensa en el juicio.

El abogado de Francisco Domingo Hernández tampoco consideraba probado que realmente existiera un delito de atentado contra agentes de la autoridad y, en caso de que así hubiera sido, alegaba que el acusado tenía “sus facultades anuladas o gravemente afectadas”, y de ahí “su extraño comportamiento”.

El propio Francisco Domingo Hernández aseguró en el juicio que no recordaba “nada” de lo sucedido, y que en aquella época se encontraba tomando “unos medicamentos muy fuertes”, que podrían haber influido “en la conducción”.

La Fiscalía, por su parte, solicitaba cuatro años de prisión, al dar por buenos los testimonios de los policías locales que testificaron en el juicio y que decían que Francisco Domingo Hernández olía a alcohol y presentaba síntomas externos de embriaguez. “Si olía a alcohol es porque había bebido”, señaló la fiscal en la vista oral, agregando que si no se le había hecho la prueba de alcoholemia había sido por prohibición del alcalde de Tías”.

Sin embargo, la Justicia ha dado la razón finalmente a Francisco Domingo Hernández, que ha quedado absuelto de los dos delitos que se le imputaban.

Según lavozdelanzarote.com:

La Sección Sexta de la Audiencia Provincial de Las Palmas ha revocado la sentencia del Juzgado de lo Penal número 1 de Arrecife, por la que se absolvió al jefe de la Policía Local de Tías, Domingo Francisco Hernández, de los delitos de atentado a agentes de la autoridad y contra la seguridad vial. El Ministerio Fiscal recurrió la sentencia y la Audiencia ha estimado su recurso, condenando a Domingo Francisco Hernández a un año y un mes de prisión.



La sala le considera culpable de un delito contra la seguridad vial por conducir bajo los efectos del alcohol y otro de resistencia a agentes de la autoridad. Además, la Audiencia Provincial condena a Domingo Francisco Hernández a indemnizar al Ayuntamiento de Tías, por los daños que causó en el uniforme de uno de los agentes que intervino el día de los hechos. La Fiscalía solicitaba inicialmente cuatro años de prisión, ya que pedía que se le condenara por el delito de atentando contra los agentes, en lugar del de resistencia.

Los hechos, que fueron juzgados el pasado mes de mayo, se produjeron en la noche del 17 de enero de 2008, cuando Hernández circulaba con su vehículo por la Avenida Central de Tías, “perdió el control del mismo y colisionó contra un turismo que estaba estacionado”. Según recoge la sentencia en los hechos probados, los agentes acudieron entonces al lugar de los hechos pero, tras “una breve discusión”, Domingo Francisco Hernández “se dio a la fuga en su vehículo hasta que fue interceptado en la carretera de Tías-Puerto del Carmen”.

La sala considera probado que, cuando el procesado abandonó su vehículo, “con absoluto desprecio por el principio de autoridad”, se abalanzó contra uno de los agentes, “agarrándole de la camisa y rompiéndole la solapa, mientras le conminaba expresiones tales como ‘te voy a abrir expediente, te ha tocado la lotería’, movido por el propósito de infundirle temor y abusando de su cargo de subinspector jefe de la Policía Local de Tías”.

Domingo Francisco Hernández fue invitado a someterse a la prueba de alcoholemia pero se negó a realizarla, “pese a tener conocimiento de que podía incurrir en un delito”, según destaca la sentencia.

La defensa del ahora condenado argumentó durante el juicio que Domingo Francisco Hernández había sido “víctima de una hipoglucemia”, que dejó “mermadas sus facultades” y que le produjo “una alteración mental transitoria”. Precisamente, el procesado declaró no recordar nada de lo sucedido y afirmó que en aquella época se encontraba tomando “unos medicamentos muy fuertes”, que podrían haber influido “en la conducción”.

En su sentencia, la Audiencia Provincial ni siquiera entra a valorar este argumento, y sostiene que queda probado que Domingo Francisco Hernández conducía aquella noche “bajo los efectos del alcohol”. En la sentencia de primera instancia, el juez del Juzgado de lo Penal número 1 de Arrecife desestimó que existiera delito, al considerar que no había quedado probado que hubiera un requerimiento legal por parte de los agentes para la realización de la prueba de alcoholemia, es decir, que se hubiera advertido al acusado de las consecuencias de su negativa.

Sin embargo, la Audiencia Provincial sostiene que al margen de su negativa a realizarse la prueba, sí existe un delito probado contra la seguridad vial, al conducir "bajo los efectos del alcohol".

Así, la Audiencia considera que los síntomas descritos durante la vista oral, tanto por los agentes que intervinieron como la sueña del vehículo dañado, “se incluyen como evidencias de intoxicación etílica”. “Es evidente que conducía en estado de embriaguez. Lo hacía en zigzag, tenía un deambular vacilante y todos los síntomas a los que hacían referencia los agentes de policía que actuaron como testigos”, señala la sentencia.

Por este delito, se le condena a cuatro meses de prisión, así como se le prohíbe conducir cualquier tipo de vehículos por un tiempo de dos años.

En cuanto al delito de atentado contra agentes de la autoridad, la Audiencia Provincial considera que “no concurre”, al estimar más ajustado un delito de resistencia. “El acusado agarra a uno de los agentes y le desgarra la chaqueta, arremete contra otro con el vehículo en marcha, provocando que éste tenga que saltar para evitar ser atropellado y amenaza a los agentes actuantes, esgrimiendo su condición de jefe de policía, con un expediente”, señala la sentencia.

Estos hechos, según la sala, “no integran la gravedad de un delito de atentado”, pero sí que integran los elementos del tipo de resistencia a agentes de la autoridad”.

La Audiencia Provincial impone a Domingo Francisco Hernández una pena de nueves meses de prisión por estos hechos, además de obligarle a indemnizar al Ayuntamiento de Tías, por los daños en el uniforme del agente.

Durante el juicio, además de diferentes agentes de la Policía Local de Tías, declararon la dueña del vehículo dañado y el hermano del alcalde de Tías, quien estuvo con el procesado horas antes de lo sucedido en casa de su hermano.

En la vista oral también estaba previsto que testificara el alcalde de Tías, José Juan Cruz Saavedra, pero la defensa renunció a su testimonio. El Partido Popular, entonces en la oposición del Ayuntamiento, fue quien llevó los hechos al Juzgado y se personó como acusación particular, aunque después renunció a ejercer ese derecho.

La causa no ha contado con pruebas nuevas, pero la Audiencia destaca que valoradas las mismas ha llegado a "distinta conclusión" a la que llegó el juez del Juzgado de lo Penal número 1 de Arrecife.

La sala explica que puede revocarse una sentencia, cuando las actuaciones pongan de relieve "un manifiesto y claro error del juzgador". En concreto, dice que la jurisprudencia del Tribunal Supremo ha venido exigiendo que el error sea" evidente, notorio y de importancia" suficiente "para modificar el sentido del fallo".

"No es una cuestión de valoración de prueba personal, pues basta con examinar la totalidad del procedimiento", señala la sentencia, "para poder concluir que el acusado, el día de los hechos, conducía bajo los efectos del alcohol y que, pese a haber sido requerido por agentes de la Policía local a someterse a las pruebas de detección alcohólica, el acusado se negó a ello".