La consejera de Industria y Comercio del Cabildo, Lourdes Bernal (PSOE), hizo públicas ayer con cierta sorpresa las alegaciones de la Corporación insular al
borrador de decreto que el Gobierno de Canarias está elaborando para regular el procedimiento de concesión de licencias comerciales específicas en el Archipiélago, en el que no se entiende bien por qué se prevé para una isla como
La Graciosa, en función de la población del municipio de Teguise al que pertenece, la posibilidad de implantar
una gran superficie de entre 750 y 1.000 metros cuadrados.

Esta posibilidad es lo que ha hecho saltar las alarmas en el departamento de Industria y Comercio del Cabildo, cuya responsable se pregunta extrañada y así lo recoge en sus alegaciones, por qué si el Gobierno establece una distinción en las islas de
El Hierro y La Gomera, dada sus respectivas poblaciones residentes, impidiendo que en dichas islas se implantes superficies comerciales
no superiores a 500 metros cuadrados, sin embargo, no se incluye en este trato diferenciado a la La Graciosa, donde la superficie comercial que prevé la futura ley sin embargo se fija entre los 750 y los 1.000 metros. Según la consejera de Industria, resulta descabellado que no se dé una consideración especial a La Graciosa, siendo además como es Parque Natural Protegido.
Según la responsable de este área en la máxima institución de la Isla, «se trata de unas dimensiones totalmente desproporcionadas para el caso de La Graciosa, más aún cuando el borrador recoge que en otras islas como La Gomera o El Hierro se permite un centro comercial de un máximo de 500 metros cuadrados, independientemente del número de habitantes de los municipios».
El Cabildo cree que es desmesurado abrir la posibilidad a que se cree un centro de estas dimensiones y mediante esta alegación, pretende evitar que en el futuro se pueda dar cabida este tipo de emplazamientos.